¿Cómo hacer tu propia mochila portabebés?

Tu bebé te necesita a tiempo completo durante sus primeros meses de vida, pero, a veces, conciliar tu vida diaria con su crianza puede convertirse en todo un reto. Afortunadamente, hay soluciones que pueden facilitarte esta etapa de apego, brindándote más libertad y autonomía. Una de ellas es, sin duda, la mochila portabebés.

Gracias a la mochila de porteo, puedes seguir pegado como una lapa a tu bebé todo el día mientras te encargas de tus recados diarios o haces ejercicio. Además, no hace falta que te gastes mucho dinero en ella; puedes fabricarla tú mismo de una forma muy sencilla y económica. ¿Quieres que te enseñemos a crear tu mochila portabebés desde cero? ¡Pues sigue leyendo!

Reúne todos los materiales para hacer tu propia mochila portabebés

 

 

Aunque parezca una tarea complicada, lo cierto es que para crear una mochila portabebés casera tan solo necesitarás algunos conocimientos de costura y los seis materiales que encontrarás a continuación. ¡Coser y cantar, todo es empezar!

• Loneta: 3 piezas de 20 cm x 1,80 cm, una pieza de 50 cm x 52 cm y otra de 35 cm x 40 cm
• Guata: 3 piezas de 50 cm x 20 cm y una pieza de 40 cm x 35 cm
• Tela estampada de tu preferencia: 1 pieza de 40 cm x 42 cm
• Un metro
• Unas tijeras
• Una máquina de coser

¡Ojo! Asegúrate de que tanto la tela como el hilo que utilizas es de buena calidad y lo suficientemente resistente como para aguantar el peso de tu bebé sin el más mínimo problema. Y nunca está de más reforzar las costuras un par de veces para asegurar un buen soporte. Toda precaución es poca.

Y, dicho esto, ¡vamos al paso a paso!

¿Cómo hacer tu mochila Mei Tai DIY paso a paso?

 

Antes de empezar, prepara una zona amplia sin objetos de por medio para extender tu tela. Así, tendrás espacio suficiente para trabajar en tu mochila portabebés cómodamente. ¡Al lío!

1. Si ya tienes todas las piezas que formarán tu mochila portabebés, ¡empecemos! Coloca la tela estampada en el centro del trozo de loneta de 50 cm x 52 cm y cósela. Esta será la pieza central de nuestra mochila que protegerá la espalda de tu bebé.
2. Para el siguiente paso, tienes que coger las piezas largas de loneta. Ubícate en el centro y marca 25 cm a cada lado, para luego coser los extremos hasta nuestras marcas. Como resultado, tendrás una apertura de 50 cm.
3. ¡Estupendo! Es momento de coger una de las piezas largas de loneta que acabas de coser. Dale la vuelta e inserta una pieza de guata por el agujero extendiéndola en su interior. Como la pieza de guata mide 50 cm, encajará a la perfección. 
4. Ahora mete la parte inferior de la pieza central en la apertura de la pieza que acabamos de enguatar y une a máquina creando un acolchado. Ya tenemos el cuerpo y la cintura de nuestra mochila portabebés. ¡Esto va viento en popa!
5. ¡Siguiente paso, manitas! Inserta las dos tiras de guata restantes dentro de las otras dos tiras de loneta y cose creando de nuevo un acolchado. Estas dos tiras harán la función de tirantes.
6. Cose los tirantes a las esquinas superiores de la pieza central, colocándolos en forma de equis, uno sobre el otro.
7. ¡Y llegó el paso final, manitas! Para crear el reposacabezas, coge tanto la pieza de loneta de 35 cm x 40 cm como la pieza de guata de la misma medida y córtalas en forma de reloj de arena. Enguata la loneta, acolcha y une esta pieza al resto de nuestra mochila.

Y voilà. Ya has creado la mochila portabebés que abrazará a tu bebé contra tu cuerpo durante un par de años.

Algunos consejos para acolchar tu mochila portabebés

El acolchamiento es quizás el paso más complicado en la elaboración de tu mochila de porteo, y por eso queremos dedicarle una sección especial. A continuación, encontrarás tres opciones diferentes para acolchar tus telas; pruébalas todas y decide con cuál te sientes más cómodo para realizar esta tarea.

• La opción más práctica es usar un prensatelas especialmente diseñado para bordar o coser en paralelo. Este tipo de prensatelas es perfecto para acolchar porque tiene líneas dibujadas que sirven de guía.
• También puede utilizar como guía la barra metálica que viene incluida en las máquinas de coser. Se instala en el portaprensatelas y ayuda a ajustar el ancho entre cada línea de bordado. ¡Este es un trucazo!
• Y por último, pero no menos importante, puedes decantarte por un prensatelas de doble arrastre. Es más, si la guata que has comprado es gruesa, esta será tu mejor opción.

Tu mochila portabebés te queda que ni pintada

Después de pasarte un buen rato elaborando tu mochila, mereces ser el primero en probarla. ¡No hay discusión! Así que póntela sin el bebé y ajústala a tu cuerpo para comprobar si necesita unos últimos retoques.

Para amarrarla, puedes hacerlo con dos nudos: uno en la parte baja de tu espalda con la tira que nace de tu cintura, y otro con los tirantes, que cruzarán tu espalda y acabarán en un nudo en la parte media de tu estómago. Esta es la forma tradicional, pero tienes la opción de añadir una hebilla en cada punto de amarre para asegurarte de que tu mochila es completamente segura y resistente.

Ahora solo te queda disfrutar de la mochila portabebés que has creado con la ayuda de Espuma a Medida y recorrer el mundo con tu pequeño viajero sobre tu pecho. Bon voyage!