POSTBLACK! 15%DTO. Cupón: POSTBLACK
Del 3 al 8 de Diciembre
Tengamos en cuenta que los bebés pueden dormir en su cuna hasta los dos o tres años, años muy importantes para su desarrollo físico, por lo que es fundamental elegir un buen colchón para asegurar el confort y la salud del bebe. Por tanto, elegir la mejor opción entre tantos colchones de cuna , es una tarea que no se puede tomar a la ligera.
Te despejamos 3 de las habituales dudas que nos asaltan a la hora de comprar el colchón de cuna:
Existen varios tipos de colchones para cuna pero los más habituales son los de muelles y los de espuma de poliuretano. Los dos tipos son adecuados siempre y cuando sean firmes y le confieran al bebé un descanso saludable.
Según la Directiva Europea 2001/95/CE en relación con los colchones de cuna el colchón no debe ser demasiado blando, ni debe ceder bajo el peso del cuerpo, incluso si se pone en pie el niño o anda por el colchón.
Los colchones de cuna suelen ser de medidas estándar (aunque puedan haber algunos que varíen ligeramente en largo y ancho). Lo habitual es que las medidas del colchón para cuna sean de 120x60 y de 140x70. El grosor del colchón suele estar entre los 10 y los 15 cm si son de espuma y de mayor grosor si son de otros materiales como por ejemplo, los colchones de muelles.
Es muy importante que el colchón de cuna sea del tamaño adecuado a la cuna ya que si es más pequeño, pueden colarse cosas entre el colchoncito y los barrotes e incluso, el bebe puede llegar a levantarlo. La normativa anteriormente citada, dice al respecto " El colchón de cuna debe cubrir completamente el somier para evitar que los brazos y las piernas del bebé queden atrapados entre el colchón y la cuna"
Es importante que el colchón tenga un protector para asegurar que está siempre en las condiciones higiénicas óptimas. Para ello existen básicamente 2 opciones: que el colchón sea desenfundable de manera que se puedas retirar la funda y lavar en lavadora. Esto suele ser lo habitual en los colchones de espuma. También está la opción de colocar encima del colchón un protector impermeable para evitar que el colchón de la cuna se ensucie.
Si tienes la opción, es interesante que la funda o protector tenga algún tratamiento tipo antiácaros o antibacterias para conseguir una mayor protección del bebé.
¡Después de todo lo dicho, que no cunda el pánico que la tarea de elegir tu colchón de cuna, no es tan complicada como parece! Si quieres asegurarte y elegir el correcto, ponte en manos de profesionales que te asesoren sobre qué es lo que más te conviene. También puedes consultarnos en [email protected]